Entrevista al lic. Ryan Bowen

Egresado del curso especializado de español para extranjeros y de la Maestría en Gestión Empresarial concentración Negocios Internacionales.

Es fundador de Chocolate Mountain y director de Litro de Luz RD.

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¿Quién es y de dónde viene Ryan Bowen?

Ryan es el papá de Marién y esposo de Jenny Checo.  Él es un estadounidense que vino a estudiar en PUCMM por un semestre en un intercambio intercultural en 2007.  Es un profesional multifacético, desenvolviéndose en las áreas de producción audiovisual, y desarrollando proyectos con lineamientos sociales y empresariales.  Nació en Oregon, USA, pero salió de Nueva York desde 2011 buscando vivir su sueño caribeño.

¿Qué te motivó a formar parte de Litro de Luz?

La primera vez que participé en un operativo fue en Mao, en una comunidad de bananeros que jamás habían tenido tendido eléctrico. Me quedé impactado viendo la rapidez de la instalación, y la sencillez de cómo se resolvía la falta de iluminación, ya que en 45 minutos los voluntarios habían transformado las vidas de estas personas. Mi vida profesional siempre se ha rodeado de organizaciones sin fines de lucro, y me conmovió que Litro de Luz podría cambiar la vida de una persona en un momento, y ya desde este instante su vida podría disfrutar un mejor bienestar.

Litro de Luz tiene presencia en numerosos países, ¿por qué decidiste establecerte en República Dominicana?

Sí, es cierto, el movimiento ha dado la vuelta por el mundo entero. En cada país de África, Asia o las Américas, los colaboradores toman la iniciativa para buscar una solución local. En RD nuestro fundador—Nicolai Rapp—estaba realizando un año de voluntariado desde Alemania en RD, y vio LDL como una excelente solución al exceso de plástico y la falta de iluminación en zonas rurales. Desde 2015 hemos impactado en más de 20 provincias en RD, y aunque ya existen numerosas comunidades donde ha llegado la luz, seguimos enfrentando la necesidad urgente de trabajar con el mejor uso de los residuos de plástico.

¿Cómo fue tu proceso de adaptación en la República Dominicana?

Aprender el español dominicano fue complicado al inicio, pero luego de mucho mangú y sancocho, uno va cogiendo el ritmo. Ya son 12 años que resido aquí, y sigo esperanzado  en causar un impacto positivo en el país, mientras que sigo disfrutando de la vida aquí.

¿Cuáles son los objetivos de Litro de Luz?

Somos una ONG que provee soluciones sostenibles a comunidades sin acceso a energía eléctrica utilizando elementos reciclados.

¿Cuáles son los proyectos a futuro de la Organización?

Transformar el plástico reciclado en utensilios para el hogar, además de linternas portátiles.  Seguimos diversificando nuestro impacto, en 2021-2022 apoyamos a dos comunidades a tener agua potable vía la creación de acueductos comunitarios. Seguir colaborando con empresas como Planeta Azul, quienes apoyaron nuestra última entrega de un acueducto en Río Grande, Puerto Plata.

¿De qué manera nuestros egresados pueden colaborar con Litro de Luz?

Somos una ONG que brinda soluciones a comunidades en necesidad de apoyo. Si son técnicos y desean colaborar con sus talentos, ¡bienvenidos sean! Si pueden apoyar siendo voluntarios y colaborar con su tiempo, escríbanos. Si tienen una empresa o desean realizar una contribución financiera, convertiremos este tesoro en una obra de bien para una comunidad que lo necesite.

¿Cuáles de los aprendizajes obtenidos en tu formación académica has aplicado en tu labor diaria?

La necesidad de buscar el porqué detrás de las cosas, la curiosidad y el pensamiento crítico.

¿Qué es y cómo surge Chocolate Mountain?

Chocolate Mountain es nuestro emprendimiento familiar que brinda una experiencia de bienestar en el monte. Es una finca de cacao en Río Grande, Altamira, en medio de la Cordillera Septentrional. Además de pasadías y tours de chocolate, alquilamos dos cabañas orientadas hacia la naturaleza para que los huéspedes puedan disfrutar la experiencia glamping, pasando la noche debajo de miles de estrellas y comiendo desde la finca a la mesa. Estamos desarrollando este proyecto para agregar valor al cacao, un rubro fundamental en la economía dominicana. Ya comercializamos una cerveza de chocolate, la Cimarrona- Cacao Stout, y seguiremos desarrollando más de esta línea de productos basada en recursos naturales y locales, y por supuesto, chocolates.

¿De qué manera contribuye este proyecto en el cuidado del medio ambiente?

Sembramos de forma orgánica y regenerativa, desde el manejo agrícola estamos comprometidos a implementar soluciones sin químicos de pesticidas e insecticidas.

Construyendo buscamos los materiales de construcción locales. Usamos métodos ancestrales de bioconstrucción y limitamos el uso de plásticos.  Nuestros diseños arquitectónicos trabajan con la tierra, no en su contra.

Durante los tours y experiencias no usamos el plástico de un solo uso.

¿Cuál de las obras sociales de las que has sido parte te ha impactado más y por qué?

La lucha por llevar agua a la comunidad de Guazarai, Río Grande, me impactó tanto física, emocional y psicológicamente.  Me solidifiqué la resiliencia de iniciar y terminar un proyecto, a pesar de cualquier reto que haya de por medio. El año pasado había hecho muchos esfuerzos y me tuve que someter a una cirugía para eliminar dos hernias, pocos días después me encontré en el monte buscando soluciones para llevar agua a esta comunidad—en contra de las recomendaciones médicas. Pedí a Dios que me cuidara y así fue, pudimos encontrar una solución para dos comunidades efectivamente. Pensé en ese momento que todo ya estaba ganado, pero ahí inició la parte más complicada, el cómo trabajar con las personas. La naturaleza es fácil, pero la gente es complicada, a veces haciendo el bien puedes encontrar personas contrarias y/o conformistas con un estatus quo mediocre. Hay muchas historias para contar, pero sobre todo aprendí mucho durante el proceso, tanto de la naturaleza como de la naturaleza del pueblo.

¿Qué acciones consideras que deben llevar a cabo las empresas para el cuidado del medio ambiente?

Reflexionar seriamente en el impacto de sus productos o servicios desde “la cuna hasta el entierro”. Muchos elogian cuando tienen un buen inicio o un buen fin, ignorando los daños colaterales de por medio.

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